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| Monolito junto a la muralla que recuerda la Eucaristía presidida por San Juan Pablo II en ese mismo lugar, en noviembre de 1982 |
Mañana martes, 13 de mayo, la diócesis de
Ávila celebrará a las 19:45 horas una Acción de Gracias por la canonización de Juan
XXIII y Juan Pablo II, en la que, además, se bendecirá una escultura de este
último, que quedará ubicada en la iglesia episcopal de San Ignacio para su
veneración pública. La fecha elegida para esta celebración tiene un doble
significado: por un lado, se celebra la fiesta de la Virgen de Fátima; por
otro, se cumplen 32 años del atentado contra Juan Pablo II en la Plaza de San
Pedro.
El hecho de que Ávila cuente con una imagen
del Papa polaco se debe a su gran vinculación con esta diócesis, que visitó en
noviembre de 1982 con motivo del centenario de la muerte de Santa Teresa. De
todos es conocido el amor singular de Juan Pablo II hacia la propia Teresa de
Jesús y San Juan de la Cruz; un amor del que dio testimonio a lo largo de su
vida. De hecho, al Doctor Místico nacido en Fontiveros dedicó su propia tesis
doctoral. Y todo ello, además, en este año en el que nos preparamos para
celebrar el V Centenario del nacimiento de Santa Teresa.
Además, recordamos que Ávila ya cuenta desde
2012 con una reliquia de Juan Pablo II. Se trata de un trozo de tela con sangre
de la sotana que vestía el día del atentado que casi le cuesta la vida, cuando
el turco Ali Agca disparó contra él mientras saludaba a los fieles en la Plaza
de San Pedro (13 de mayo de 1981). Esta reliquia llegó a la diócesis abulense
el 28 de enero de 2012, de manos del postulador de la Causa de Canonización del
Papa polaco, monseñor Slawomir Oder. Él mismo explicaba ya entonces que Ávila
recibía esta reliquia debido al "sentido carmelita de Juan Pablo II,que
estaba muy vinculado a San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús"; de
hecho, aseguró que el Papa Wojtyla "siempre decía en su biografía que se
sentía carmelita de corazón". La reliquia está situada en un relicario en
forma de custodia, tiene un tamaño aproximado a una moneda de dos céntimos, y a
su alrededor puede leerse: "Es sanguine beati Joanni Pauli II Papae" (puesto
que cuando la recibió la diócesis, Juan Pablo II aún era beato). Esta reliquia
puede venerarse en la Catedral del Salvador, en la conocida como "Capilla
de la Virgen Blanca", junto a una imagen de la Piedad, otra de Santa
Teresa, la Virgen de la Caridad y Jesús Sacramentado.
La imagen del Papa Wojtyła que se ubicará en
la iglesia de San Ignacio es de madera tallada y policromada en la que San Juan
Pablo II, revestido con ornamentos litúrgicos, porta en su mano izquierda el
báculo con la Cruz, presentando una actitud de acogida. La altura de la
escultura es de 145 cm y se halla en una peana arropada sobre una hornacina de
madera tallada y policromada de estilo clásico, abrazada por dos columnas con
capitel corintio y el tercio inferior del fuste tallado. En la cartela superior
está inscrito el escudo de Juan Pablo II. El conjunto artístico, que alcanza
una altura total cercana a los tres metros (escultura más hornacina), se ha
realizado en el taller Artemartínez, taller de arte en madera y policromía de
la localidad de Horche (Guadalajara).
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