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| Saludo de Don Jesús a los feligreses de Palacios de Becedas |
El pasado domingo, el Obispo de Ávila ha visitado las
parroquias de Santa Lucía de la Sierra y Palacios de Becedas, del Arciprestazgo
de Barco de Ávila, celebrando con ellos la Eucaristía y haciéndose cercano a
cada uno de ellos, sobre todo después de los acontecimientos acaecidos
hace unas semanas con el incendio provocado que puso en grave peligro la vida
de vecinos y propiedades.
Comenzó la jornada en Santa Lucía de la Sierra con la Eucaristía
de las 10.30 horas, donde el recibimiento fue muy caluroso hacia D. Jesús y sus
acompañantes. Algunos asistentes habían retrasado su viaje de vuelta de
vacaciones para poder estar al lado de su Obispo. Con la Iglesia prácticamente
llena de fieles, la celebración transcurrió en un ambiente de familia y acción
de gracias, despidiéndose con gran afecto de todos.
En Palacios de Becedas celebró la Misa a las 12
horas. Le esperaba todo el pueblo a la entrada de la iglesia haciendo un
pasillo, y el Sr. Obispo saludó a todos, uno a uno. Unos vecinos aún
consternados por el fuego que asoló esta zona de la provincia de Ávila. Recordamos
que tuvieron que ser desalojados durante el transcurso del incendio forestal,
mientras corrían peligro sus casas e incluso sus vidas. El paisaje ahora es
desolador. El señor Obispo les ha hecho llegar la cercanía de toda la
diócesis y su solidaridad, sobre todo a través de la oración. Durante
la homilía, el Obispo recordó que nuestro Padre Dios es un Dios cercano, que se
preocupa por cada uno de sus hijos; y al mismo tiempo, la importancia del
corazón, de donde brotan las buenas o las malas acciones. También hizo
referencia a que los males, como el incendio, son fruto del pecado del hombre,
de su egoísmo.
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